Actualmente la importancia de que, tanto trabajadores autónomos, pymes, grandes empresas y en definitiva, cualquier entidad cumpla el RGPD (Reglamento Europeo de Protección de datos) y demás normativa como la LOPD (Ley Orgánica de Protección de Datos de carácter personal) es innegable. Esta legislación ayuda a proteger los datos personales de los ciudadanos de la UE, garantizando que se traten de forma segura y responsable. Esto significa que las empresas, entidades, y cualquier persona que trate datos de personas deben tomar medidas para asegurar que los datos personales se almacenen de forma segura, se protejan contra el acceso no autorizado y se utilicen de forma responsable.
Además, el Reglamento Europeo de Protección de Datos (RGPD) también establece una serie de derechos para todos los ciudadanos de la UE. Estos derechos incluyen el derecho a acceder a sus datos personales, el derecho a solicitar la rectificación de sus datos personales, el derecho a solicitar la eliminación de sus datos personales y el derecho a oponerse al procesamiento de sus datos personales. Estos derechos ayudan a garantizar que los ciudadanos de la UE tengan el control sobre sus datos personales.
Por último, el RGPD también establece una serie de sanciones para aquellas empresas que no cumplan la ley, siendo en España la Agencia Española de Protección de Datos el organismo encargado de imponerlas, así como de ejercer la autoridad y control en lo referente a la protección de los datos personales.
Las empresas y profesionales deberán permanecer observantes en esta materia dado que, la Agencia Española de Protección de Datos, se toma muy en serio cualquier reclamación de derechos, y ello se refleja en la magnitud de las sanciones que, ante incumplimientos de la normativa en materia de protección de datos, ha impuesto en 2022: 283 sanciones por un valor total cercano a los 23 millones de euros.
